El éxito no es sexy. Representa esfuerzo, sacrificio, constancia y disciplina día a día. No es fácil alcanzarlo mucho menos para mentes llenas de pretextos que se concentran más en los problemas que en las oportunidades. Todo es una elección, nada es por qué sí.
Tú decides seguir trabajando con tu jefe…
Tú decides estar otro año más en el tráfico…
Tú decides quejarte del salario mínimo y seguir buscando empleo…
Tú decides dudar de aquel negocio que te presentó un ser querido el cual ayudaría a mejorar tu situación actual…
Tú decides pensar que siempre te va a ir mal…
Tú decides mejor no arriesgar y seguir haciendo lo mismo y obtener lo mismo…
Tú decides seguir dudando de tus capacidades y decir que no eres bueno para eso…
Tú decides posponer más oportunidades…
Tú decides seguir pensando de la misma forma…
Tú decides seguir teniendo la vida que tienes y no la que te gustaría tener…
El secreto del éxito está entre tus dos orejas y en tu corazón. Crear es creer y creer es crear.